1. En un tazón grande, mezcla la carne de pollo molida, el huevo, el pan rallado, el perejil picado, sal y pimienta. Forma pequeñas albóndigas del tamaño de una nuez con la mezcla y reserva.
2. Calienta un poco de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Agrega las albóndigas y cocínalas hasta que estén doradas por todos lados. Retíralas de la sartén y reserva.
3. En la misma sartén, agrega un poco más de aceite de oliva si es necesario y cocina la cebolla, el ajo y la zanahoria rallada hasta que estén tiernos.
4. Agrega el Tomate Triturado Cirio y el Tomate Pelado Cirio a la sartén. Rompe los tomates pelados con una cuchara de madera y mezcla bien. Cocina a fuego medio-bajo durante unos 15-20 minutos, hasta que la salsa espese ligeramente.
5. Mientras tanto, cocina la pasta en agua con sal siguiendo las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Escúrrela y reserva.
6. Una vez que la salsa de tomate haya espesado, añade las albóndigas cocidas a la sartén y mezcla suavemente para cubrirlas con la salsa. Cocina durante unos minutos más para calentar las albóndigas.
7. Sirve la pasta en platos individuales y coloca algunas albóndigas con salsa por encima. Espolvorea queso parmesano rallado por encima y decora con perejil fresco.
¡Listo para disfrutar! Toma una foto apetitosa de tu deliciosa pasta con salsa de tomate y albóndigas de pollo, y compártela en tus redes sociales.